martes, enero 30, 2007

El escudo de armas de Castro

No estoy muy informada de esto de los escudos familiares, no entiendo qué relevancia puedan tener en las personas que lo llevan, lo que sí sé es que el significado de mi primer apellido tiene mucho que ver conmigo y me agrada.

Agradezco a mi primo que me dejó subir esto desde su blog.


Te quiero mil primo



Origen: Castellano. De la Villa de Castrogeriz (Burgos). Parte de la palabra latina "castrum", castillo, casa fuerte o castillo fortificado. Es uno de los cinco linajes procedentes de los primitivos reyes de Castilla.Una rama pasó a Galicia fundando nueva casa en Monforte de Lemos (Condes de Lemos). De esta estirpe procede Don Rodrigo Diaz, señor de Vivar, más conocido con el sobrenombre de "Cid Campeador".Descripción del Escudo de Armas: En campo de plata seis roeles de azul puesto de dos en dos.

jueves, enero 04, 2007

Lo que no te mata

Tengo una única cábala para el año nuevo: desde las doce de la noche hasta los primeros 10 días de Enero es como va a ser mi año entero, es por eso que para el abrazo nunca lloro, siempre sonrío y me lleno de alegría y trato de estar siempre contenta, sin peleas, estable durante los otros días. Esta cábala me ha resultado desde los 16 años.
Así comencé al año 2006, como yo quería que comenzara, contenta feliz, estable…pero algo pasó, hubo una falla que no reconozco.




Me estoy sacando el 2006 de encima, me sacudo como un perro se sacude el exceso de agua, me estoy sacando esos 365 días y dejándolos atrás, en el camino, tal como hago con todos los años para dejarme envolver con el año que comienza, pero con el 2006 es distinto, me sacudo de otra forma, con más prisa, con más desesperación, me pica, me pesa en la espalda y en el alma, me molesta y me tiene un poco molesta su aliento caliente en mi oreja, así es que me lo saco de encima, lo tiro, lo miro y sigo.

El 2006 fue el año del perro y como leí en un artículo de una revista por ahí, este perro me ladró pero no me mordió (¡a-ha!) Sentí más agresivo este año, me golpeó fuerte varias veces y en distintos aspectos: en mi ego primero, luego en mi orgullo, en mi impaciencia, en mi bolsillo, en mi nula capacidad de decisión, en mi cuerpo y finalmente remató con mi salud.

Mi madre, sabia mujer, me dice que uno aprende más de las cosas malas, o sea cuando uno sufre o se frustra, o pierde, etc. Dice que eso pasa porque las cosas buenas, por su condición, pasan no más, sin mayor importancia, en cambio las cosas malas nos marcan y por ende, aprendemos de ellas. Yo estoy de acuerdo con su pensamiento porque lo encuentro lógico y porque lo he vivido, sobre todo este año 2006. Con cada golpe, una enseñanza, claro que la enseñanza se demoró un poco porque una tiene que desaturdirse primero, pero el aprendizaje igual llega. Y de ese aprendizaje necesito hacer un desglose con todos los detalles que aprendí el año 2006:


1.- No siempre puedo conseguir todo lo que quiero.
2.- Mis deseos tienen directa relación con el objeto del mismo y que, por ende,
3.- No sólo porque yo lo quiera, se hace, sino que debe quererlo el objeto en cuestión.
4.- Ser tan orgullosa no me lleva a ningún camino, todo lo contrario:
5.- Puedo perder mucho por mi orgullo.
6.- No lo puedo querer todo ahora porque no estoy sola en este mundo.
7.- Las cosas que quiero también dependen de los otros, por lo que:
8.- Debo saber esperar (esta es más difícil)
9.- El que guarda siempre tiene (esta también es muy difícil)
10.- Estar conciente de las decisiones que tomo en la vida
11.- Asumirlas
12.- Reconocer el límite de consumo de alcohol en las fiestas.
13.- Beber en exceso ya no me resulta saludable, ni seguro y al final tampoco es divertido.
14.- Dejar de creer que a mi no me “pasan balas”
15.- No soy inmune a ningún tipo de enfermedad ni accidente.
16.- A pesar de todos los puntos anteriores, no olvidarme jamás que estoy viva.
17.- El presente es lo único seguro que tengo para vivir.


No sé si su peso, su mal aliento, o la totalidad de sus golpes hicieron que al final del año cayera en cama, pasando dos fiestas importantes del año, con dieta, fiebre, somnolencia y acostada en mi cama: Infección al riñón me dijeron en el hospital el día 31 de Diciembre “la tenemos que hospitalizar” dijo el doctor, en ese momento pensé un montón de cosas: mi mamá, la cena de año nuevo, la fecha tan especial…¡el abrazo!, ya me veía dándole el abrazo al doctor con mis viejas muy arregladas a mi lado, el cola de mono y el pan de pascua en esa mesita metálica que te ponen al lado de la camilla (la escena era chistosa, pero sólo en mi imaginación) Mientras imaginaba esto llamé a mi madre para conversar la situación y nos dimos cuenta que no podemos pagar una hospitalización, así es que le dije al doctor que haría el tratamiento en mi casa. Con mucha desconfianza y pocas especificaciones, me entregó el tratamiento y me tuve que ir justo cuando la fiebre comenzaba a apoderarse de mi.


Así pasé un 31 con sus 00:00 horas en pijama, con dieta y con una infección en el riñón. Pero cuando di el abrazo sentía mucha alegría, estaba muy contenta por el cambio de año y en mi mente me decía: “le tengo fe al 2007”, mi cara estaba llena de mi sonrisa y no se me calló una sola lágrima.